Vecinos Giovana y Mario están sorprendidos; señalan que no eran violentos

  • Vecinos y familiares se dijeron sorprendidos de que la pareja esté involucrada en la muerte de la niña sustraída y asesinada

ABRAHAM NAVA
ÉXCÉLSIOR/CDMX

A 200 metros de la casa cateada la noche del 18 de febrero por la Fiscalía capitalina en la colonia San Felipe, vive Petra García, abuela materna de Mario Alberto «N», uno de los dos sospechosos buscados por el feminicidio de la niña Fátima Cecilia.

Ella reconoce en las fotos de búsqueda a su nieto y a la pareja de éste, Gladys Giovana. Sin embargo, asegura que no estaba en contacto con ellos.

“Desde que se juntaron quizá una, dos tres veces la he visto porque le digo no nos frecuentan y nosotros, así como dice el dicho entre los parientes y el sol entre más lejos mejor, para evitar problemas”, señaló Petra García, abuela de Mario Alberto.

Se dijo también molesta por la muerte de la niña y asegura que la justicia se encargará de resolver el caso.

“No quedo conforme, porque son familiares pero que la justicia que haga lo que tenga que hacer, es la justicia la que tiene que decidir el que nosotros nuestras familias a su hijo de mi hija, mi nieto tampoco lo vamos a solapar”, aseguró.

Vecinos de la pareja se dijeron sorprendidos de que Mario y Giovana estén involucrados en la muerte de la menor.

“Muchos lo conocían por “El Tortuga” entonces quién sabe pues ayer yo me sorprendí por la movilización que había de policías. Somos vecinos de toda una vida o sea yo al chavo lo veía que trabajaba en un mototaxi. En cuestiones a lo mejor de convivencia si tú quieres de borracheras, pero nada más. Era una persona que no se metía con nadie con su pareja.

“Yo nunca llegué a tener roces nada más buenas tardes, buenos días, la muchacha era muy callada muy reservada, salían muy pocas veces al día. Tenían tres hijos o dos, pues realmente nada más era que les van a recoger a la escuela y se volvían a meter. Salían juntos y regresaban juntos, nunca los vi que fueran violentos. Ayer todavía alcancé a ver que estaba el mototaxi, pero yo pasé alrededor de las cuatro de la tarde”, señaló Álvaro, uno de los vecinos.