A 9 años de Ingrid y Manuel aún viven en campamentos en la sierra

ALBERTO GÓMEZ/RÉPLICA
CHILPANCINGO, GRO.

A nueve años de las tormentas Ingrid y Manuel, 244 familias de la comunidad de Chicahuales, municipio de Chilpancingo, denunciaron que aún habitan en campamentos improvisados en un terreno que legalmente pertenece al ejido de Santiago Tlacotepec, debido a que el Gobierno no ha cumplido con el proceso de reconstrucción.

El comisario y representante de bienes comunales de esa localidad,

Ruperto Moreno Adame y Rafael López Sánchez, indicaron en conferencia de prensa que «hay gran preocupación» entre los habitantes porque cerca de la mitad de los pobladores regresaron al pueblo a vivir pese a que hay un dictamen de riesgo emitido por Protección Civil que alerta que es inseguro vivir en esa población

Dijeron que la decisión de regresar a la comunidad se debe a que las autoridades no han dado seguimiento a su situación y los dejaron abandonados a su suerte tras el paso de las tormentas.

«Fueron a vernos y nos entregaron un folio del censo, aquí los tenemos pero hasta el momento no hay ningún seguimiento, no llegó ningún apoyo y como hemos podido construimos casas de madera y en ellas nos resguardamos».

Mencionaron que han enviado escritos a la Sedatu, a la gobernadora Evelyn Salgado, a la presidenta Norma Otilia Hernández, y a todos los funcionarios que podrían intervenir para que se atendiera su situación pero nadie los atiende.

Denunciaron que hay temor que ocurra una desgracia con los pobladores que decidieron regresar al pueblo donde podría haber un accidente que dañara a sus vecinos.

Señalaron que el pueblo tiene 244 familias y un total de mil 100 habitantes, que son los mismos que tiene que reubicarse.

«Santiago Tlacotepec ya hizo la donación del terreno a favor del ayuntamiento, ahora se requiere que se hagan las gestiones para que se entregue la tierra de manera legal a las familias y así se puedan edificar las viviendas, de lo contrario seguiremos viviendo en la incertidumbre y no podemos hacer nada ya que es un terreno ajeno».