Denuncian hostigamiento de la CRAC-PC en San Luis Acatlán

YONATHAN BAUTISTA
SAN LUIS ACATLÁN, GRO.

Eulalio Hernández Hernández, taxista de 53 años, originario de Acapulco pero radicado en San Luis Acatlán, denunció sentirse hostigado por parte de la CRAC-PC, pues dijo haber interpuesto una denuncia y sentirse obligado a desistir de ella.

“Quiero denunciar el acoso y hostigamiento que estoy pasando por parte de la CRAC-PC, ya que me siento intimidado para que yo desista de una demanda que he querido interponer con ellos, por un asalto que sufrí en el vehículo que yo trabajaba de ruta local, esto sucedió el pasado sábado 4 de septiembre, a la altura de la taberna ubicada frente de la unidad deportiva, donde 3 sujetos que tengo plenamente identificados, a uno de ellos le nombran el Chivi o Chiri, de la colonia Ejido, y el otro de apellido Garzón, de la colonia Bethel.

“El día sábado para amanecer domingo, alrededor de la 1:30 de la mañana, aproximadamente, yo presté mi servicio a un pasaje conocido, lo llevé al bar mencionado. Al dejarlo en el lugar estos tres individuos se subieron al taxi y con palabras obscenas empezaron a agredirme diciéndome que ya había valido verga, pidiéndome que los llevará al Carmen.

Yo les puse de pretexto que me estaba esperando otro cliente, pero al ver uno de ellos que no circulaba, el de los Garzón me puso una botella en la cabeza simulando un arma, por lo que estaban empezando a salir de dentro del bar a ver que  pasaba; el Chiri sacó la llave y me pidió que me pasara a la parte de atrás, yo aproveché para bajarme de la unidad y empecé a forcejear con ellos, de eso tengo evidencias, mi ropa está destrozada, traía yo mi cangurera y empezaron a registrarla y me despojaron de eso que había  trabajado un día antes, me quitaron la cuenta del taxi, me quitaron lo que tenía yo que pagar de renta”.

“En total me quitaron la cantidad de 15 mil pesos, cuando sustrajeron el dinero tiraron el bolso e ingresaron al bar, yo me acerqué con la gente, para esto, en el forcejeo me golpearon, me brinqué al panteón y allí fue donde yo le empecé a llamar a algunas personas diciéndole lo que me había sucedido. El dueño del carro me vino a recojer a la puerta del panteón y empezamos a buscarlos con los compañeros del sitio y el dueño del carro, ya que el carro había quedado afuera de la cantina, es un Tsuru con número económico 93 perteneciente al sitio de taxis Virgen de Juquila del sitio de los Rojos”.

“Fuimos aa la CRAC y apagaron las luces, cortaron cartuchos y abrieron la puerta, yo les dije que venía a poner la denuncia de lo que me había pasado y me dijeron que yo acudiera el día lunes. No hicieron ningún intento por buscarlos ni apoyarme, por lo que continuamos rastreando el carro y resulta que el carro lo tenían los elementos en las instalaciones, nunca nos dijeron que ellos tenían el carro”. “Resulta que al regresar nosotros al bar y para darles los datos de los que nos asaltaron, y al momento que regresamos nos atravesaron la unidad vehícular con agresiones verbales y físicas; y resulta que cuando nos meten a las instalaciones nos percatamos que la unidad estaba adentro, no sé cómo es que la unidad llegó a la CRAC, tampoco nos informaron si ellos había acudido a recogerlo, no nos dieron información”.

“Estuvimos retenidos por un aproximado de 40 minutos, más tarde los liberaron y me dijeron que fuera el día lunes a levantar la demanda, el día lunes yo hablé con el dueño del carro”.

“Me presenté a las 10:00 de la mañana, no me anotaron y me pasaron con los coordinadores y me despojaron de mis pertenencias, me metieron a una celda, no me explicaron de nada hasta alrededor de las 6:00 de la tarde que llegó mi patrón y comprobó que era su unidad, a si mismo, le informaron a mi patrón que yo estaba en calidad de retenido”.

“Fui careado con los coordinadores, donde me tomaron una declaración, la firme y me dieron una hoja para que yo metiera una demanda y que me presentará al siguiente día para poderle dar seguimiento al asunto. No  he llevado la hoja de la demanda porque temo volver a ser privado de mi libertad o ser golpeado”.

“Un  elemento de la CRAC, el día de ayer por la noche, me notificó verbalmente que me andaban buscando para entregarme un citatorio para que me presente, desconozco de qué sea el citatorio, pero temo por mi integridad, tanto con los de la CRAC como con mis agresores, ya que me los he encontrado en la calle sin problema alguno, haciendome señalamientos de amenazas. Por lo que pido la atención de las autoridades para que mi problema sea resuelto”, finalizó.