Icono del sitio El Faro de la Costa Chica

Sheinbaum rechaza compra de equipo de espionaje a Israel

No se está comprando nada en este momento al Estado de Israel o alguna de las empresas”, afirmó la Presidenta

XIMENA MEJÍA/AFP
EXCÉLSIOR/CDMX

La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó que su Gobierno adquiriera equipo israelí, a diferencia de las pasadas administraciones que adquirieron el software Pegasus con el que hubo espionaje.

En su conferencia de prensa matutina, la Jefa del Ejecutivo aclaró que “hay equipo que se compró en su momento, que requiere refacciones”.

“No se está comprando nada en este momento al Estado de Israel o alguna de las empresas, hay equipo que se compró en su momento que requiere refracciones, entonces, solamente, en todo caso es una refracción, pero de los nuevos equipos que se están comprando, no se está comprando nada”, puntualizó.

La mandataria federal fue consultada sobre el llamado del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump al cese al fuego entre Israel e Irán, a lo que respondió “Nosotros siempre vamos a ser factor de paz”.

En julio de 2021, Excélsior Digital publicó que Israel presumía de ser un país pionero en innovación tecnológica, pero las acusaciones de espionaje a periodistas y activistas a través del programa Pegasus de la empresa israelí NSO reflejan el lado oculto de esta diplomacia digital.

Creada en 2010 por Shalev Hulio y Omri Lavie y afincada en Herzliya, al norte de Tel Aviv, la empresa israelí NSO suele recibir críticas por su programa Pegasus.

Este programa de espionaje no solo sirve para acceder a los datos de un teléfono móvil inteligente, sino que también toma el control de la cámara y del micrófono.

Medios internacionales revelaron que piratearon y espiaron a través de Pegasus los números de al menos 180 periodistas, 600 políticos, 85 activistas defensores de los derechos humanos o 65 empresarios.

En Israel, este programa es considerado como un «arma» y para ser vendido a los servicios secretos de otros países debe obtener el visto bueno del Ministerio de Defensa israelí.

NSO rechazó este lunes en un comunicado las «acusaciones fraudulentas» y aseguró que solo actúa «para salvar vidas e impedir crímenes y actos de terror».

“No habíamos recibido hasta hoy ninguna prueba de que una persona en esta lista fuera un objetivo del sistema Pegasus», justificó Oded Hershkovitz, un portavoz del grupo, en declaraciones a la radio israelí.

Sin embargo, la gran cuestión es saber si NSO conocía la existencia de las personas espiadas, enfatiza May Brooks-Kempler, una experta israelí en ciberseguridad.

“Deberíamos ser más conscientes de los clientes de esta tecnología y no venderla a regímenes que pueden utilizarla para espiar a su población y sus opositores. Se trata en el fondo de un problema especialmente para el Ministerio de Defensa (que autoriza su exportación)», subraya esta experta.

Tecnologías
represivas

El Ministerio de Defensa de Israel indicó que «no tiene acceso a las informaciones recopiladas por los clientes de NSO», pero recordó que se toman medidas «apropiadas» si los clientes de estos programas vulneran las condiciones de uso.

En Israel, hay varios centenares de empresas en el sector de la ciberseguridad y algunas de ellas están especializadas en tecnologías ofensivas, que permiten infiltrarse en otros sistemas.

El entonces director de la Autoridad israelí de la Innovación, Aharon Aharon, declaró en 2019 que «en el uso de tecnologías (de ciberseguridad) hay una parte buena y también puede haber una parte más oscura. Creo que NSO se basa, en cierta medida, en este lado oscuro».

“Israel es una incubadora de tecnologías represivas», dijo Jonathan Klinger, un abogado especializado en el derecho informático. “Es un modelo de negocios triste (…), pero no es ilegal», contrasta.

Salir de la versión móvil