Cinco alcaldes asesinados en tres años; sólo uno con proceso judicial
* De 2022 a 2025, cuatro alcaldes en funciones y uno electo han sido asesinados en Guerrero en distintos hechos violentos.
* Solo en uno de los casos se ha iniciado un proceso penal formal
YENER DE LOS SANTOS
CHILPANCINGO, GRO.
En los últimos tres años, de 2022 a 2025, Guerrero ha sido escenario del asesinato de cuatro alcaldes en funciones y un presidente municipal electo. A pesar de la gravedad de estos hechos, únicamente uno de los casos cuenta con un proceso penal en curso.
Este lunes se confirmó el fallecimiento de Isaías Rojas Ramírez, alcalde de Metlatónoc por el Partido del Trabajo (PT), quien permanecía hospitalizado desde el pasado 28 de mayo tras ser herido de bala en un presunto intento de asalto en la Autopista del Sol, en el tramo Eduardo Neri–Chilpancingo. Viajaba de regreso de la Ciudad de México junto a su esposa, Almari González Romero, cuando sujetos armados intentaron detener su vehículo; al no lograrlo, abrieron fuego.
Fuentes de seguridad confirmaron que Rojas Ramírez recibió al menos tres disparos: uno en el tórax y dos en el abdomen. El alcalde llevaba apenas siete meses al frente del ayuntamiento de Metlatónoc, uno de los municipios más marginados del país, a más de 250 kilómetros de la capital del estado.
Según datos del portal Data México de la Secretaría de Economía federal, Metlatónoc fue catalogado en 2022 como el municipio con mayor rezago social del país: el 67.8% de su población vivía en pobreza extrema.
La muerte de Isaías Rojas deja acéfalo a un municipio que sufre la carencia de servicios básicos como salud y educación.
Montaña y
Tierra Caliente
El asesinato del alcalde de Metlatónoc se suma a otros hechos violentos recientes contra autoridades municipales en Guerrero. El 21 de junio de 2024, Acasio Flores Guerrero, alcalde de Malinaltepec por el Partido Encuentro Solidario, fue asesinado por pobladores armados en la comunidad de Alacatlatzala, quienes lo mantenían retenido cuando acudió a inaugurar una obra. Su cuerpo fue hallado esa misma noche en una camioneta oficial abandonada sobre la carretera Tlapa-Marquelia.
Meses después, el 5 de octubre de 2024, Conrado Mendoza Almeda, alcalde de San Miguel Totolapan por el PRD, fue asesinado junto a su padre, el exalcalde Juan Mendoza Acosta, y al menos 17 personas más, en una incursión armada en el Ayuntamiento perpetrada por un grupo criminal.
El caso más atroz ocurrió el 6 de octubre de 2024, cuando Alejandro Arcos Catalán, alcalde de Chilpancingo por la coalición PAN-PRI-PRD, fue localizado sin vida apenas seis días después de asumir el cargo. Su cuerpo decapitado fue hallado en una camioneta abandonada en la colonia Villas del Roble. Este es el único caso con avances judiciales: tres audiencias se han realizado contra el principal acusado, Germán Reyes Reyes, ex encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública municipal.
Copala
El 17 de junio de 2024, fue asesinado Salvador Villalva Flores, presidente municipal electo de Copala por el partido México Avanza, apenas días después de ganar la elección. Villalva, capitán retirado de la Marina, fue atacado cerca del poblado San Pedro Las Playas, en Acapulco, mientras regresaba en autobús de la Ciudad de México.
En todos los casos, la Fiscalía General del Estado ha informado, a través de breves comunicados, la apertura de carpetas de investigación por “homicidio calificado”. Sin embargo, únicamente el asesinato de Alejandro Arcos ha derivado en un proceso penal formal.
La impunidad y la violencia que rodean a estos crímenes reflejan la grave situación de inseguridad que vive Guerrero, donde ser alcalde se ha convertido en una labor de alto riesgo.
