Cae director del C2 de Juchitán por nexos con el crimen organizado

PATRICIA BRISEÑO
EXCÉLSIOR / CDMX
El director del Centro de Control y Comando C2, Nahúm H.B., de Juchitán de Zaragoza, en la región del Istmo, quedó a disposición del ministerio público de la Fiscalía General del Estado (FGEO) por el delito contra la seguridad pública.
Bernardo Rodríguez Alamilla, fiscal del estado reveló a la prensa que a través de un análisis forense de extracción de datos, labores periciales y ministeriales que se realizaron en el C2, “se descubrió que las imágenes de video del sistema de monitoreo público se transmitían en espejo a personas no autorizadas”.
Presuntamente, el ex funcionario habría trabajado para la delincuencia organizada e incluso obstruido con videos de la fuga de los delincuentes tras cometer los distintos ilícitos, incluyendo asesinatos.
“¿Por qué hicimos esto (el arresto)? Sabíamos que había algunos elementos al interior de la Policía Municipal y del C2 para favorecer a grupos delincuenciales”, subrayó.
En tanto 218 policías municipales fueron separados y serán sometidos a exámenes de control de confianza para lograr su certificación.
Tras la separación de los policías, los trabajos de seguridad quedan a cargo de la Policía Estatal de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), junto con la Defensa Nacional, Secretaría de Marina y la Guardia Nacional.
En tanto que, se estableció un mando coordinado entre las Fuerzas Federales, Estatales y la Fiscalía de Oaxaca, encabezado por un Comandante de la Policía Estatal de la SSPC, quien será el responsable de la seguridad en el municipio zapoteco.
Dijo que la intervención emprendida deriva de la Operación Sable no solo apunta a depurar la corporación policiaca, sino a atacar de raíz las causas del desorden.
En ese sentido, también se pondrá en marcha un reordenamiento vehicular en el transporte público de Juchitán, incluyendo taxis, mototaxis y unidades del servicio urbano y suburbano”, adelantó.
En paralelo, se refuerzan operativos en la periferia del municipio, para blindar la región y evitar que la delincuencia aproveche cualquier vacío de autoridad.
Aseguró que estas acciones forman parte de un esfuerzo integral para combatir la corrupción, frenar la violencia y devolver la paz a una de las zonas más golpeadas por la inseguridad en el Istmo de Tehuantepec.