Ofrecen recompensa de 1 millón de pesos por El Bukanas, huachicolero y expolicía

LOURDES LÓPEZ
EXCÉLSIOR/VER.

A pesar de que hay una ficha de búsqueda en contra de Roberto de los Santos de Jesús, alias El Bukanas, con la que ofrecen una recompensa de 1 millón de pesos, las autoridades policiacas no lo han podido detener, pero a su nombre continúan los hechos violentos que son reconocidos por las autoridades veracruzanas.

Tal es el caso de la desaparición de las cuatro personas en el municipio de Camerino Z. Mendoza: Víctor Adell, Antonio Sánchez y sus primos Honorio e Ileana Iveth López, ocurrida el pasado 8 de diciembre, las autoridades justificaron la desaparición forzada al exhibir la imagen de uno de los desaparecidos junto al delincuente.

Antonio Sánchez se observa en una fotografía sentado cerca de donde está de pie El Bukanas, un expolicía que se dedicó al huachicol y está vinculado con la organización criminal de Los Zetas.

Presuntamente, señalan las autoridades, esta relación y el asesinato de uno de los agentes de tránsito que participaron en la detención de la unidad, fue la que desencadenó la sustracción de las cuatro personas.

El nombre de El Bukanas se hizo público durante el bienio del exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien en una conferencia anunció que la banda criminal de Roberto de los Santos era la autora de los atracos a trenes en la región de Acultzingo, por lo que las autoridades ofrecieron 5 millones de pesos por quien ofreciera información sobre su paradero.

Durante la presente administración la recompensa bajó a sólo un millón de pesos, pero no ha sido detenido, pese a los señalamientos que también lo involucran en el robo de hidrocarburo en la región de Acultzingo.

Presuntamente, la banda de El Bukanas tiene una rivalidad con la banda encabezada por un sujeto a quien apodan El Momo, organización que es una escisión del Cártel de Jalisco Nueva Generación y de la que presuntamente eran cómplices los agentes de Tránsito de Camerino Z. Mendoza.

Por su parte, la familia de Víctor Adell Sánchez ha reclamado estas aseveraciones y exigió a las autoridades estatales resarcir el nombre del empresario, pues afirman que no está involucrado en ningún acto ilegal y su presencia en la delegación obedeció a que tenía que ir a pagar la multa que le imponían los agentes a su trabajador.

Además, insisten en cuestionar la actuación del alcalde Héctor Rodríguez en este caso, ya que al ser el responsable de la corporación consideran que también tenía conocimiento de lo que hacían sus elementos, lo que ha reiterado la esposa de Adell, Jéssica Blanco Tinoco.