Propone diputada que violencia ácida sea tentativa de feminicidio

*A la iniciativa también se le conoce como Ley Malena

*Se propone imponer penas de 12 a 30 años de cárcel a los victimarios

ROSARIO GARCÍA OROZCO
SNI/CHILPANCINGO, GRO.

La diputada Gloria Citlali Calixto Jiménez propuso tipificar la violencia ácida como tentativa de feminicidio, y que se les imponga a los victimarios penas de 12 a 30 años de cárcel de acuerdo a la gravedad de la lesiones que provoquen a sus víctimas .

La iniciativa propone que de reformarse la Ley 553 para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y al Código Penal del Estado de Guerrero, a efecto de incluir a la “violencia ácida” como un tipo de violencia contra las mujeres, que se refiere al uso de cualquier tipo de agente o sustancia química, corrosiva, tóxica, inflamable, incluyendo alcoholes, ácidos, irritantes, líquidos a altas temperaturas, medicamentos, drogas, gases o cualquier otro producto que provoque lesiones y cause daño físico irreversible a una mujer.

La iniciativa también plantea considerar este tipo de violencia como tentativa de feminicidio, en casos en los que las lesiones provoquen daños graves en el cuerpo de la mujer, como la resección parcial o total de las mamas, alteraciones en el aparato genital, en las funciones de reproducción sexual, así como daños en órganos, extremidades, sentidos y capacidades laborales de forma permanente.

Agregó que la violencia ácida contempla el uso de cualquier tipo de agentes o sustancias químicas, corrosivas, tóxica, inflamable, incluyendo ácido, irritantes, líquidos a altas temperaturas, medicamentos, drogas, gases o cualquier otra sustancia que provoque lesiones, daño físico irreversible a una mujer o alguna discapacidad.

La legisladora morenista recordó que se han registrado por lo menos 28 casos de mujeres agredidas con ese tipo de sustancias, de los cuales hay 20 sobrevivientes de por lo menos cinco estados, entre los que se encuentran Veracruz, Chiapas y Oaxaca.

En su participación en la máxima tribuna del estado dijo a sus compañeros legisladores: «imagínense lo que es que su piel se desprenda, que después de dolorosísimas semanas de recuperación y múltiples cirugías reconstructivas, sepan que su agresor quien le quiso asesinar y borrar, sigue libre, imagínense que pese a todas las pruebas que pudieran reunir para proceder contra su agresor únicamente se le den uno o dos años de prisión, que cada vez que se despierten o se vean en el espejo vean las cicatrices que recorren todo su cuerpo y que le recuerde la terrible violenci que vivieron, eso es parte de la violencia ácida».

Sostuvo que la violencia ácida es mucho más profunda que la violencia física porque trastoca la identidad, es una de las formas más extremas de violencia que el feminicidio, pues si bien no logran quitarte la vida sí logran arrebatarte la identidad, «los estragos se vuelven parte de tu persona, el morbo y el estigma te persiguen, dejas de ser conocido como la mujer con sueños y aspiraciones que has construido una identidad propia, y pasas a ser la mujer que quemaron y a la que le impusieron la identidad que no escogió, tu persona se reduce a eso y las secuelas, físicas, psicológicas y sociales, que son terriblemente profundas».

Finalmente externó que según la estadística, al año se producen al menos mil 500 agresiones de ese tipo alrededor del mundo, siendo las mujeres más del 80 por ciento de las víctimas registradas, en México es ampliamente conocido el caso de María Elena Ríos Ortiz, la saxofonista víctima y sobreviviente a un brutal ataque de violencia ácida.

La iniciativa fue turnada a las Comisiones Unidas para la Igualdad de Género y de Justicia.