Localizan cadáver en una fosa clandestina; estaba reportado como desaparecido

UPOEG capturó a dos hombres involucrados en su homicidio, quienes señalaron el lugar donde habían enterrado el cuerpo

REDACCIÓN
OMETEPEC, GRO.

Integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) encontraron el cuerpo de Roberto Mejía Martínez en una fosa clandestina, ubicada en la parcela del señor Rafael Rojas, en la comunidad de Rancho Los Moreno, municipio de Ometepec.

Cabe recordar que Roberto Mejía fue reportado como desaparecido desde el viernes 5 de marzo.

Según la información proporcionada por sus familiares, alrededor de las 6:00 de la mañana de ese viernes, salió acompañado de su sobrino Joel, sin decir a dónde, y ya no regresó.

Por este motivo, solicitaron el apoyo de las autoridades y de la ciudadanía para localizarlo, pero al ver que no había respuesta positiva, pidieron la intervención de los policías ciudadanos de la UPOEG, quienes luego de algunos días de investigación lograron dar con los responsables de su homicidio y con el lugar donde enterraron su cuerpo.

Fueron los policías ciudadanos de la UPOEG, instalados en la comunidad de Cruz de Corazón, quienes lograron capturar a dos hombres involucrados con su desaparición, uno de ellos su sobrino Joel “N”, y el segundo es un taxista identificado como Marcó “N”.

Después de un interrogatorio, ambos confesaron su crimen, por lo que este jueves 11 de marzo, Joel los llevó hasta el lugar donde estaba enterrado el cadáver.

Cabe señalar que uno de los detenidos dijo en su declaración que su compañero asesinó a Mejía Martínez, alrededor de las 3:00 de la tarde del viernes 5 de marzo, por un problema amoroso; mientras que el segundo detenido también acusó a su compañero de haberlo asesinado, pero por un problema de tierras.

Los policías ciudadanos avisaron a la Fiscalía General del Estado, quienes acudieron al lugar a realizar las diligencias correspondientes y la exhumación del cadáver, por lo que al finalizar lo enviaron al Servicio Médico Forense (Semefo) de Marquelia, para la necropsia de ley, pues no presentaba heridas visibles.

Sus familiares identificaron el cadáver de Roberto Mejía Martínez por la vestimenta y la gorra que usaba el día de su desaparición; en vida se desempeñaba como campesino y ayudante de albañil, tenía 36 años y era originario de la comunidad del Rancho Los Morenos.