Quienes resulten electos en Morena, carecerán de legitimidad: Cayetano

El diputado marquelino considera que se debe informar de ello a los Protagonistas del Cambio Verdadero y resistir el avasallamiento del poder político al movimiento

Anuncia que presentará una reforma para que la injerencia de los órganos electorales en la vida interna de Morena ya no se repita, “y demandaré a los magistrados del TEPJF”

REDACCIÓN
MARQUELIA, GRO.

El diputado por el distrito 08 de Costa Chica, Rubén Cayetano García, mantiene su posición en contra de la encuesta abierta que realizará el INE para elegir a la nueva dirigencia nacional, y señala que quien triunfe en esta elección “carecerá de legitimidad de la base del partido”.

En un mensaje que divulgó a través de sus redes sociales, Cayetano García escribió: “No caer en la tentación de apoyar a un candidato(a) para dirigir Morena, significa no convalidar la intromisión del TEPJF e INE. Quién ‘triunfe’ en esa elección carecerá de legitimidad de la base del partido”.

Agregó que el propósito de los miembros de Morena debe ser “repudiar el injerencismo anticonstitucional”.

Dijo que también se debe informar de ello a los Protagonistas del Cambio Verdadero y resistir el avasallamiento del poder político al movimiento.

El usuario Jo Sanser le pregunta: “Y entonces mi diputado, ¿qué estrategia va usted a tomar? Si la encuesta la hiciera el partido tampoco le creerían”

Rubén Cayetano García respondió: “Voy a presentar una reforma para que eso ya no se repita y demandaré a los magistrados del TEPJF”.

Este martes concluye el registro de aspirantes a dirigir Morena a nivel nacional, y el INE ya eligió a las encuestadoras que habrán de aplicar la encuesta abierta que ordenó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Esto debido a que los líderes del partido no se ponían de acuerdo en el método y venían atrasando el proceso desde noviembre del año pasado.

Incluso, la actual dirigencia de Morena había solicitado una prórroga para el cambio, alegando la pandemia de Covid-19, prórroga que el TEPJF desechó.

En la petición formulada por el partido se solicitaba que la renovación se realizara hasta 90 días después de concluidos los procesos electorales del próximo año.

Sin embargo, el TEPJF consideró improcedente la prórroga ya que implicaba una modificación de casi un año en el cumplimiento de la sentencia.

“Al responder el argumento de que Morena no puede llevar a cabo la elección por la emergencia sanitaria del COVID-19, se le recuerda que sí es posible ya que incluso el INE acordó realizar los comicios locales en Hidalgo y Coahuila el próximo 18 de octubre, tomando en cuenta las medidas sanitarias correspondientes”, apuntó el Tribunal Electoral.

“Con este criterio se privilegia el orden público e interés social que reviste el cumplimiento de las sentencias, así como el derecho de la militancia a la renovación periódica de sus órganos”, explicó el TEPJF.

Encuesta abierta

Asimismo, el Tribunal estableció que la encuesta tendrá que estar abierta a las “personas que se autoadscriban como militantes y simpatizantes de Morena”, ya que al padrón oficial del partido le falta “certeza y confiabilidad”.

Esa decisión se tomó el pasado 20 de agosto pasado. La Sala Superior del Tribunal Electoral federal ordenó que el INE organice la encuesta con la que se deberá renovar la dirigencia nacional de Morena.

En sesión privada, la mayoría de magistrados indicó que, para tal fin, el Instituto Nacional Electoral (INE) dispondrá de los recursos monetarios del propio partido.

Conforme la resolución aprobada, el INE tendrá 30 días para llevar a cabo la encuesta, fecha que se cumple en la tercera semana de septiembre.

La posibilidad de que dicha encuesta sea “abierta” desató una revuelta entre los morenistas.

El actual dirigente del partido, Alfonso Ramírez Cuéllar, calificó la decisión como un “asalto político que viola la vida interna de Morena”, y lo mismo han hecho otros líderes, entre ellos Rubén Cayetano García en Guerrero.

Ramírez Cuéllar advirtió una “intervención grosera, burda y alevosa” por parte del Tribunal electoral y alertó que hacer una encuesta abierta permitiría la participación de simpatizantes de la oposición.

Únicamente el coordinador de los diputados morenistas, Mario Delgado, quien aspira a dirigir el partido, saludó la resolución del Tribunal y acusó a Ramírez Cuéllar de querer eternizarse en la dirigencia.

Delgado defendió la encuesta para militantes y simpatizantes, para “poner en manos de la gente la decisión” del liderazgo de la formación política.

Retrasos

Cabe recordar que Yeidckol Polevnsky, debía convocar en noviembre del año pasado una elección interna para renovar la dirección, pero lo aplazó indefinidamente por irregularidades en el censo y por conflictos entre sus facciones.

Incluso Polevnsky fue acusada de irregularidades en el manejo de los recursos del partido, lo cual desembocó en la elección de Ramírez Cuéllar como dirigente sustituto, en un consejo político que también fue cuestionado, y quien también tenía la consigna de convocar a la elección para el cambio de acuerdo con los estatutos del partido.

INE reconoce

ilegalidad

Al respecto, el INE explicó en un comunicado que desde 2014 tiene la facultad de participar en la organización de los procesos internos de los partidos políticos, siempre y cuando estos lo soliciten, situación que no se cumple en este caso, ya que la organización de este proceso de renovación de dirigencia partidista de Morena se sustenta únicamente en una sentencia de la Sala Superior del pasado 20 de agosto, en la que se le ordenó al Instituto realizar una encuesta abierta para definir su designación.

“El partido no solicitó la participación del INE en el proceso de renovación de su presidencia y de su secretaría general; no hay, pues, un fundamento legal para ello y el procedimiento cuyos lineamientos y cronograma estamos hoy definiendo. No se basa en lo que Morena estableció en sus estatutos, sino en una resolución de la Sala Superior”.

Córdova lamentó el momento de la determinación del TEPJF, ya que ésta se presenta en un contexto sumamente complicado para el INE, el cual “nunca fue consultado respecto a si contaba con las capacidades técnicas, materiales o con la disponibilidad de tiempo para asumir esta responsabilidad”.

La consejera Dania Ravel destacó que, además del gran reto que representa organizar un proceso electoral como el de 2021 (que comenzó ayer lunes), en medio de una pandemia, se suma éste, ya que si bien el Instituto tiene facultades para organizar la elección de los órganos de dirección de los partidos políticos, la Ley General de Partidos Políticos señala, expresamente, que el Instituto no podrá colaborar para este fin durante el Proceso Electoral Federal y, en este caso, es evidente que la mayor parte de los trabajos para llevar a cabo la selección de estos cargos del partido ocurrirán ya iniciado el proceso.

Ravel explicó que, aunque la Sala Superior argumentó que esa disposición de la Ley General de Partidos Políticos sólo se aplica cuando la colaboración la solicita el partido y no cuando media una sentencia, lo cierto es que la razón de ser de esa disposición no varía a partir de quién solicite u ordene la colaboración del INE.

“La razón de no distraer al Instituto de su labor constitucional y organizar elecciones, subyace en ambos supuestos; sin embargo, tenemos que cumplir una sentencia y lo haremos como siempre, de la mejor manera”, dijo Pavel.

Pese a esta ilegalidad, el INE comenzó el proceso de la encuesta y este martes terminó el registro de los aspirantes, entre los que figuran 16 a la presidencia y 23 para la secretaría general, más lo que se acumulen en los últimos minutos del proceso.

Este martes, por ejemplo, acudieron a su registro Porfirio Muñoz Ledo y Gribrán Ramírez, el más joven de los aspirantes.

Un día antes lo hicieron Alejandro Rojas Díaz-Durán y Mario Delgado Carrillo.

Sin embrago, los lineamientos del INE indican que participarán como máximo seis candidatos para cada cargo, por lo que, al haberse triplicado los registros, se realizaría una segunda encuesta de reconocimiento para dejar a los seis que tengan más aceptación de la militancia.