Temen por integridad de Francisco Martínez; fue anexado contra su voluntad en Ometepec

* Fue detenido por la Policía Municipal el pasado 26 de marzo, y  llevado a un centro de rehabilitación de Alcohólicos Anónimos.

MIGUEL ÁNGEL SANTOS
OMETEPEC, GRO.

Familiares y amigos del señor Francisco Ramírez Santiago, piden al apoyo de los 3 niveles de gobierno y la Comisión de Derechos Humanos, para rescatarlo del Centro de Rehabilitación de Alcohólicos Anónimos en Ometepec, ya que fue anexado en contra de su voluntad desde el 26 de marzo.

Temen por su salud e integridad física, ya que estos lugares tienen fama de maltratar a los internos.

La denuncia fue realizada por Isabel Guzmán, quien por medio de un escrito, narró que el licenciado Francisco Ramírez Santiago fue detenido en el centro de Ometepec por elementos de la Policía Municipal el 26 de marzo, pero en lugar de llevarlo a la comandancia fue trasladado al Grupo “El Despertar” con anexo del 4º y 5º paso, que es un centro de rehabilitación para adictos de alcohol y drogas, el cual está ubicado en la colonia La Mira.

Francisco Ramírez Santiago tiene 37 años y es originario de la comunidad del Charco de la Puerta, en donde acudió a visitar a unos familiares y sólo había tomado una cervezas para comer, por eso, cuando lo detuvieron tenía aliento alcohólico.

En la narración, señala a la mamá del afectado, Elia Santiago, y su esposa Adelina, como las responsables de ordenar su detención, y llevarlo para que fuera anexado por 3 meses, pero temen por su integridad, porque el responsable del centro de rehabilitación, Pedro García Jiménez, es señalado de ser un alcohólico que no brinda información del estado de salud que guardan sus internos.

La mujer asegura que “el licenciado Francisco se encuentra privado de su libertad”, pues ni a los abogados le permitieron entrar para verificar su estado de salud.

Señala que ha sido injusto el proceder de la madre y la esposa, al anexarlo en un centro de rehabilitación, ya que esta acción le perjudicará en su profesión, pues el daño moral es demasiado, cuando de por medio existe una menor de edad que es producto de su matrimonio.